¿Por qué los sionistas odian a los veteranos? Esa es la pregunta que muchos estadounidenses se plantean después de ser testigos del ataque de los medios de los lobbies de Israel contra el liberado prisionero de guerra, el sargento Bowe Bergdahl.
Desde 2001, los soldados estadounidenses han arriesgado sus vidas en una cruzada cuyo principal beneficiario es el régimen israelí. Cerca de 5000 efectivos han muerto en Irak - casi 4500 de ellos desde que Bush declaró "cumplida la misión". Otros 4000 soldados y contratistas estadounidenses han muerto en Afganistán. Se estima que unos 320.000 veteranos tienen lesiones cerebrales, y alrededor de 18 se suicidan cada día, según el Dr. Ira Katz, director de Asuntos de Veteranos para temas de Salud Mental.
Pero, como admitía el periódico Jewish Daily Forward, sólo un 0,64 por ciento de las víctimas de la "guerra contra el terror" de Estados Unidos son judíos estadounidenses. Eso significa que los sionistas, la columna vertebral del lobby sionista, que representa aproximadamente el 2,5 % de la población de Estados Unidos, tienen una mínima representación entre los que se desangran, sufren y mueren en la guerra sionista contra el Islam, impulsada por Israel.
Mientras tanto, los sionistas judíos neoconservadores del núcleo duro están masivamente representados entre la élite política del PNSA (Proyecto para el Nuevo Siglo Americano) que organizó el "nuevo Pearl Harbor" del 11S, y puso en marcha la interminable e inútil guerra de Estados Unidos contra la población musulmana mundial. También entre los propietarios de grandes medios de comunicación y sus mascotas prenstitutas de la expertocracia.
Se podría pensar que las voces de los medios neoconservadores sionistas colmarían de honores y gratitud al sargento Bergdahl, un goy de buen corazón que sufrió y se sacrificó por una causa que era de ellos, no de él. En cambio, recibe solo malos tratos.
Fox News, la voz extraoficial de la brigada neoconservadora de Netanyahu, ha publicado recientemente el llamativo titular: "EXCLUSIVA: documentos secretos demuestran que Bergdahl declaró la yihad en cautiverio." El autor de la historia es James Rosen, un propagandista neoconservador judío sionista. Su fuente es un mentiroso comprobado: un traficante de drogas de la CIA y perjuro convicto, Dwayne "Dewey" Claridge, archiconocido de la familia criminal Bush. Su teoría de que Bergdahl "declaró la yihad" - es un absurdo. (Sólo un legítimo jefe de Estado islámico puede declarar la yihad.)
Fox - el arma de rayos sigilosos israelí dirigida contra la mente de los estadounidenses - fue incluso mucho más bajo cuando empezó a acosar a la familia del sargento Bergdahl. El rabioso "canal de noticias" la emprendió contra Obama por abrazar a sus padres en la Casa Blanca, e insultó al padre de Bergdahl para llevar barba y "parecerse a un miembro de los talibanes."
El comediante Jon Stewart respondió: "En primer lugar, ¿quién c**** es usted para juzgar lo que hace un hombre, si piensa que podría ayudarle a recuperar a su hijo? Y no quiero enredar su odio hacia el vello facial, amigo, pero mi duda es si usted le diera a Bob Bergdahl un pañuelo y un pato, le parecería j****mente bien."
Los extremistas islamófobos detrás del teatro de odio orwelliano de la Fox están despotricando que el sargento Bergdahl es un "desertor" y un "colaborador del enemigo." ¿Por qué? Porque el sargento Bergdahl, como la mayoría de los estadounidenses, sabe que las guerras del 11S fueron lanzadas en base a mentiras... y que los mayores embusteros eran Fox News y el resto de medios infestados de neoconservadores.
Son la Fox News y el "poderoso Wurlitzer" totalmente sionista conservador los desertores, colaboradores y traidores. Al pregonar la gran mentira del 11S, y las pequeñas e infinitas mentiras islamófobas a que dio lugar, ellos desertaron de los EE.UU. para unirse a los peores elementos de Israel. Ellos han colaborado en la destrucción de la Constitución estadounidense. Como le dije a Sean Hannity en su programa del 10 de julio de 2006, la Fox debe salir del aire. Yo debería haber añadido que él y los otros traidores de Fox deberían ser juzgados, condenados y pasados por un pelotón de fusilamiento.
Pensándolo bien, la ejecución humana podría ser un destino demasiado suave para Hannity, vocero de los medios en la traición del 11S. Su último escándalo: el 3 de junio, Hannity invitó a un amigo del sargento Bergdahl a su programa y acosó brutalmente al hombre por resistirse a los viles intentos de Hannity de etiquetar a Bergdahl como un traidor. No es de extrañar que muchas personas pongan Fox News puramente por el entretenimiento de ver a imbéciles como Hannity revolcarse en la inmundicia y la degradación.
El día antes del ataque repugnante de Hannity al amigo de Bergdahl, Fox trajo a uno de los sionistas más maniáticos en el Congreso, el senador John McCain, para reforzar sus ataques contra el intercambio de prisioneros de Obama. El padre de McCain, el almirante John S. McCain, supervisó el encubrimiento de la masacre israelí de marineros estadounidenses en el falso ataque fallido al USS Liberty en 1967. A los marineros del Liberty que sobrevivieron se les comunicó que sus familias serían asesinadas si hablaban sobre la carnicería provocada deliberadamente por Israel contra la tripulación desarmada de la nave espía estadounidense. El hombre detrás de esas amenazas era el almirante traidor McCain.
El senador John McCain ha seguido los pasos del traidor de su padre. Derribado en Vietnam, la entusiasta cooperación de McCain con sus captores norvietnamitas le valió el sobrenombre de "el pájaro cantor de Hanói". Después de su liberación, McCain lanzó una carrera política, cuya característica distintiva ha sido su servicio a la bandera israelí y al sindicato del crimen sionista detrás de ella. McCain encubrió el trabajo interno del 11S, al apoyar e introducir el libro de Mecánica Popular, atacando al movimiento por la verdad - un acto que, por sí mismo, debía conducirlo a la horca por traición. El estribillo favorito del senador McCain tras el 11S: el karaoke de Beach Boys "bomba-bomba-bomba, bomba-bomba para Irán."
En su entrevista con el cazador de brujas anti-Bergdahl de Fox News, McCain atacó incoherentemente al general Martin Dempsey, jefe del Estado Mayor Conjunto, quien al parecer apoyó el intercambio del prisionero: "No voy a comentar sobre el general Dempsey. El punto es que se ha vuelto irrelevante para mí, y todo el escenario de hablar de seguridad nacional."
Seamos honestos. A McCain no le agrada el general Dempsey porque este es proestadounidense, mientras que McCain es un agente de Israel. McCain y sus amos del AIPAC han estado presionando frenéticamente para arrastrar a EE.UU. cada vez más en la profundidad del pantano de Oriente Medio; Dempsey ha estado, de forma silenciosa pero efectiva, bloqueando esos esfuerzos. McCain y su padrino sionista, Sheldon Adelson, quieren "bomba-bomba para Irán", mientras que Dempsey dice que la era de las guerras de Estados Unidos para Israel ha terminado.
Es McCain y el resto de guerreros en sillas de rueda neoconservadores que luchan para Israel - no el general Dempsey - quien se está volviendo irrelevante.
Obama y Dempsey deberían haber cambiado a McCain por el sargento Bergdahl. Y deberían haber agregado a Hannity y a unas pocas docenas más de gallinuelas de Fox News. Cinco años en un campamento talibán en el este de Afganistán darían tiempo a estos cretinos para reflexionar sobre su papel de propagandistas del genocidio al servicio de una potencia extranjera.
Los veteranos de Estados Unidos se están dando cuenta, poco a poco, de cuán terriblemente se han aprovechado de ellos los arquitectos sionistas de las contiendas del 11S. Están empezando a ver a través del esmog tóxico de la propaganda de Fox News. Más y más personas están recurriendo a los medios de comunicación alternativos como VeteransToday.com, la publicación de veteranos más leída en Estados Unidos, que no toma prisioneros en su crítica inquebrantable contra la mendaz y maliciosa cruzada del lobby israelí contra el mundo musulmán.
Para esta creciente multitud de veteranos enojados, el sargento Bowe Bergdahl es un héroe al estilo del general Smedley Butler, el mayor líder militar estadounidense de todos los tiempos. El libro de Butler ‘La guerra es una estafa’ saca a la luz el hecho de que, como dijera Michael Rivero, "todas las guerras son guerras de los banqueros." El sargento Bergdahl, al igual que el general Butler, ha rechazado las falsas guerras y golpes de Estado de banqueros y sionistas. Al igual que Pat Tillman, Bergdahl rechazó una guerra criminal y pagó un precio. Ahora, las mismas fuerzas que asesinaron a Tillman están difamando a Bergdahl.
El linchamiento mediático del sargento Bergdahl debe parar. Si Rupert y sus propagandistas genocidas no son procesados en breve, los patrióticos veteranos buscadores de la verdad en Estados Unidos podrían tomar la decisión de marchar contra la sede de Fox News y darle un nuevo y literal significado a la frase linchamiento mediático.
No hay comentarios:
Publicar un comentario