La CIA en las últimas décadas ha sobornado -con decenas de millones de dólares- a funcionarios afganos y señores de la guerra, incluyendo a los taliban, con el fin de tener influencia en los asuntos internos del país centroasiático.
De acuerdo con el informe publicado este lunes en el periódico norteamericano 'The New York Times' (NYT), distribuir efectivo ha sido un procedimiento estándar para la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por sus siglas en inglés) en Afganistán desde el inicio de la guerra.
La mayor parte del dinero estadounidense distribuido en Afganistán por la CIA fue enviado aproximadamente cada mes en maletines, mochilas y bolsas de plástico a la oficina del presidente afgano Hamid Karzai, revela el informe.
“No hubo pruebas de que Karzai recibiera dinero personalmente”, dijeron funcionarios al diario estadounidense.
The New York Times, citando a altos cargos estadounidenses, ha señalado que hay poca evidencia de que el denominado “dinero fantasma” haya tenido el resultado que la CIA estaba buscando, en su lugar alimentó la corrupción y dio poder a los señores de la guerra, socavando la estrategia de salida de Washington de Afganistán.
“La mayor fuente de corrupción en Afganistán era Estados Unidos”, apuntó un funcionario estadounidense no identificado.
Gran parte del dinero de la CIA fue a parar en manos de los señores de la guerra y políticos, muchos de los cuales con lazos con el tráfico de drogas y en algunos casos a los taliban, dijo el New York Times.
Esto es, mientras que Irán y Rusia, entre otros países de la región, han acusado en reiteradas ocasiones a las fuerzas extranjeras, lideradas por Estados Unidos, de promover el comercio de estupefacientes, y de esforzarse para la persistencia del terrorismo y la inestabilidad en Afganistán y el país vecino, Paquistán.
Estados Unidos y sus aliados invadieron Afganistán en 2001 so pretexto de luchar contra el terrorismo, y en cierta forma, lograron alejar al grupo armado Taliban del poder; sin embargo, años después de la invasión, la anarquía y la inseguridad aumentan y los civiles pagan el precio de esta contienda con muerte, inseguridad y destrucción.
Tomado de: http://www.hispantv.com
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