El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski (centro), se une a los líderes del G7 en Hiroshima (Japón), 21 de mayo de 2023. (Foto: Getty Images)
Una agencia rusa de inteligencia dice que Occidente planea reforzar su influencia sobre el gobierno de Ucrania mediante el nombramiento de una suerte de “virrey”.
De acuerdo con un informe del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR, por sus siglas en ruso), las potencias occidentales tienen planes de introducir el cargo de “enviado especial” en Ucrania para poder influir en Kiev y que pueda tomar decisiones “correctas”.
Un comunicado del organismo señala que Estados Unidos y el Reino Unido tratan de convencer a otros países del Grupo de los 7 (G7) sobre la necesidad de crear este puesto de “virrey” en el Estado ucraniano.
Este enviado especial tendría acceso constante al presidente Volodímir Zelenski y conocería todos sus planes. También tendría que bloquear los pasos de los dirigentes ucranianos no acordados con Washington y Londres, proponiendo en su lugar soluciones correctas, indica el texto, que cita al director de la Inteligencia rusa, Serguéi Naryshkin.
El comunicado menciona que así los países de Occidente siguen robusteciendo sus mecanismos de “administración exterior directa del territorio bajo control del régimen de Kiev”, detallando que entre las posibles candidaturas a este cargo figura el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, reseña RT.
Según el SVR, esta idea surgió dada la posición actual de Ucrania en su conflicto con Rusia, agravada por los fracasos en el frente, incluida la contraofensiva, las disputas sobre la movilización y las dificultades en recibir la ayuda militar desde países occidentales.
“En este sentido, Washington y Londres empezaron a temer la traición de muchos representantes de la élite de Kiev, que podrían intentar ‘adelantarse a los acontecimientos’ pasándose de antemano al bando de los futuros vencedores”, añadió el organismo.
Asimismo, la Inteligencia rusa cree que existe una alta probabilidad de que la creación del puesto de “virrey” en Kiev no conduzca a los resultados esperados por Estados Unidos y el Reino Unido.
Por el contrario, vaticina que el “enviado especial” no se mantendrá durante mucho tiempo “en el pantano de Kiev, lleno de odio mutuo, intrigas, engaños, halagos y traiciones”.
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