miércoles, 21 de abril de 2021

Rusia y Ucrania suenan tambores de guerra: ¿Cómo están armados?

Un sistema de misiles balísticos intercontinentales Yars RS-24 y otros vehículos militares en un desfile en Moscú, 24 de junio de 2020. (Foto: AFP)

Rusia y Ucrania acumulan fuerzas en la frontera común, lo que es visto como preludio de una guerra, pero cuáles son sus posibilidades ante una arremetida frontal.

Analistas y altos mandos militares en Europa y Estados Unidos no descartan el estallido de una contienda bélica entre Moscú y Kiev, que en realidad mantienen un conflicto técnico desde 2014, cuando los crimeos decidieron, en referéndum, dejar de pertenecer a Ucrania y volver a ser parte de Rusia.

Conforme a una publicación de este miércoles en el diario español La Razón, Rusia sería el “claro vencedor en cuanto capacidades militares”. Sin embargo, las fuerzas militares rusas en ningún caso alcanzarían una victoria rápida y fácil.

Ambas partes mantienen sus posturas y advertencias. Ucrania se ha venido reforzando militarmente con ejercicios y compras, cuenta con aliados de Occidente y uno de ellos es EE.UU. Además, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) desplegó tropas en Kiev mientras que el presidente ucraniano pide ser miembro de esta alianza para afrontar lo que llama “amenaza rusa”.

Por su parte, Rusia ha movilizado sus fuerzas en el flanco oriental, poniendo de relieve que es dentro de su territorio y sin ningún carácter invasivo, aunque, recalca que responderá enérgicamente a cualquier agresión.

El periódico a continuación compara, teniendo en cuenta el índice GlobalFirePower el peso militar de ambos:



Ucrania
Ocupa el puesto número 36 de los ejércitos más poderosos del GlobalFirePower. El ejército ucraniano dispone actualmente de 255 000 tropas y 900 000 reservistas que podrían ser movilizados en cualquier momento. Su presupuesto anual destinado a defensa asciende a 9600 millones de dólares.

Las fuerzas aéreas de Ucrania cuenta con un total de 285 aparatos, de los que 25 son cazas de ataque, 42 son aeronaves de transporte, interceptores y aparatos de entrenamiento, 111 helicópteros de transporte y 34 helicópteros de ataque. Las Fuerzas de Tierra disponen de 22 430 tanques, 11 435 vehículos blindados, 550 lanzaderas de cohetes, 2040 carros de artillería remolcada y 40 de artillería autopropulsada.

La Armada ucraniana es quizá el punto débil de sus fuerzas militares. El mar Negro sería uno de los escenarios principales en caso de conflicto. Rusia y Ucrania se repartieron la Flota del Mar Negro tras el colapso de la Unión Soviética en 1991. Sin embargo, Ucrania a duras penas tiene fondos para mantener estos activos. Su flota naval no cuenta con destructores ni corbetas. Sus activos se limitan a 11 embarcaciones de patrulla, una fragata y un barco antiminas.

Rusia
Ocupa el puesto número 2 del GlobalFirePower. Las fuerzas militares rusas han experimentado por un importante proceso de modernización en los últimos años en los que, el presidente Vladimir Putin se ha propuesto devolver a Rusia a su papel de gran potencia militar en el mundo. Las Fuerzas Armadas rusas cuentan con un millón de tropas activas, dos millones de reservistas y 550 000 efectivos paramilitares. La Fuerza Aérea está formado por 742 aviones de combate, 789 aviones interceptores, bombarderos y de aparatos de entrenamiento, 1.540 helicópteros de transporte y 538 helicópteros de ataque.

Las Fuerzas de Tierra suman 13 000 tanques, 27.000 vehículos blindados, 6540 piezas de artillería autopropulsada y 4465 de artillería remolcada además de 390 lanzaderas de cohetes. Las Fuerzas Navales también son muy superiores a las de Ucrania. Moscú posee un portaaviones, 15 destructores, 85 corbetas, 11 fragatas, 64 submarinos, 65 patrulleras y 48 antiminas.

En caso de conflicto, Rusia puede recurrir a unidades especializadas como la Séptima División de Tropas Aerotransportadas, basada en Novorosíisk, uno de los principales puertos rusos del mar Negro.

Tanto Kiev como Washington buscan achacar a Moscú el conflicto en el este de territorio ucraniano, lo que ha sido rechazado por las autoridades rusas, acusando a Occidente, de incitar a Rusia a iniciar un nuevo capítulo de beligerancia con los separatistas prorusos de la región de Donbás (en el este de Ucrania). Desde Rusia dicen que la intervención de la OTAN en esta zona conflictiva llevará al colapso de toda Ucrania.


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