Por el momento, hay información de que el golpe recayó en un gran grupo de mercenarios extranjeros, algunos de los cuales supuestamente participarían en el entrenamiento directo del ejército ucraniano para trabajar en equipos militares extranjeros, y algunos fueron utilizados directamente en las hostilidades.
Según datos preliminares, alrededor de 250 mercenarios extranjeros pueden estar aún bajo los escombros, ya que las fuentes informan que este es el número de mercenarios que se consideran desaparecidos.
Los propios militares ucranianos están posicionando el ataque actual en Lviv como uno de los más poderosos desde el comienzo de la confrontación.
Cabe señalar que uno de los motivos del ataque podría ser un video publicado en el dominio público, en el que se puede ver a varias decenas de mercenarios extranjeros, principalmente de Polonia, que iluminaron su lugar de despliegue con ellos.
En cuanto a la destrucción de los sitios de almacenamiento de equipo militar, por el momento no hay detalles al respecto, sin embargo, los tanques Challenger 2, en los que se entrenó el ejército ucraniano, podrían haber sido alcanzados.
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