sábado, 23 de marzo de 2013

El estremecedor discurso con el que un asesino adolescente insulta a los familiares de sus víctimas




TJ Lane tuvo la oportunidad de dirigirse a las familias de los tres adolescentes que había asesinado en una parada de autobús de Ohio (Estados Unidos) en febrero de 2012. Era su juicio, podía ser condenado a tres cadenas perpetuas y esta era la oportunidad de aportarle algo de consuelo a la gente a la que había dejado sin hijos. De decirles que algo había aprendido desde entonces, de pedirles perdón.
En su lugar, este estudiante de 18 años, hizo algo muy distinto: pronunciar un discurso tan ofensivo que no puede reproducirse por escrito, que culminó con un “que os jodan a todos” y una peineta.
TJ Lane y su camiseta de "Asesino" (ABC News)Lane ya había dejado claro que sería un acusado hostil cuando, al llegar al juicio, se desabrochó la camisa azul que llevaba puesta para que se viera la camiseta que llevaba puesta debajo, en la que se leía la palabra “Killer” (asesino) escrita con rotulador.
Eso era, efectivamente, lo que era. El 27 de febrero de 2012, abrió fuego sobre quienes esperaban junto a él a un autobús que los llevara a una escuela alternativa, matando a Daniel Parmertor (16 años), Demetrius Hewlin (16 años) y Russell King (17 años) e hiriendo a otros tres.
La defensa ha explicado que había intentado convencer, sin éxito, a Lane para que no pronunciara ese discurso pero Lane lo hizo de todas formas.
También había sonreído cuando los familiares de los fallecidos se dirigieron a él tildándole de “repulsivo” y pidiendo que le encerraran “como a un animal” el resto de su vida.
Pasó, por ejemplo, cuando declaró la hermana de Russell King, diciendo que “semanas antes de la matanza, Russell le dijo a sus amigos que quería pasar tiempo con su futuro asesino, que sentía pena por él”. Aquí Lane sonrió.T. J. Lane hizo una señal obscena a los familiares de las víctimas durante su sentencia en Ohio (Reuters)
Peor fue cuando Dina Parmertor, la madre de Daniel, explicó al juez que “quiero que sienta mi ira; después de hoy, me niego a concederle ni un segundo de mis pensamientos. Es repulsivo y no pienso pronunciar su nombre jamás”. Aquí Lane se rió abiertamente.
“Sufro cada minuto de cada día”, prosiguió Dina. “Lloro todos los días. Nunca seré la misma por su culpa. Mis hijos me miran y no ven a la misma madre que tenían antes”. Añadió la madre que ahora teme cada vez que sus hijos salen de casa por si no vuelve a verlos. Para ella, Lane es una “patética excusa de ser humano” y un “monstruo”.
Y todo esto, ¿por qué? El juez David Fuhry no consiguió dar con ninguna explicación, “ni siquiera una pista. Atacó sin motivo, provocación o razón discernible. Como si simplemente quisiera salir en las noticias. Esto lo convierte en una persona extremadamente peligrosa”.
Ni siquiera las habituales defensas basadas en enfermedades mentales sirvieron en este caso. “Al contrario”, continuó el juez. “TJ Lane era un estudiante inteligente que iba a graduarse muy pronto. No estaba loco, incapacitado o trastornado el 27 de febrero. Llevó a cabo un plan para matar consciente y metódicamente. Por supuesto que sabía que lo que estaba haciendo estaba mal”.
TJ Lane ha sido condenado a tres cadenas perpetuas sin posibilidad de fianza. Quizá entonces se cumplan los deseos de Dina Parmertor: “Espero que tu vida en la cárcel sea fría, dura, desagradable, con monstruos como tú”, le espetó al muy entretenido Lane. “Si pudiera elegir, sufrirías una muerte lenta y tortuosa. Eres débil, vil y cobarde”.
Fuente: Yahoo! US

No hay comentarios: